Frenos inalámbricos para bicis

la Universidad Saarland ha creado un sistema de frenos inalámbricos para bicis con una fiabilidad asombrosa y que servirá para probar en el mundo real el mismo concepto que se usaría en trenes o coches pero sin poner en peligro a tanta gente mientras se mejora el sistema.

A pesar de que todavía está en pruebas, según los modelos matemáticos que han realizado usando algoritmos de control para la industria química y aeronáutica tiene una fiabilidad del 99,999999999997%.

El sistema funciona apretando el mango de goma de la parte derecha del manillar, que frena más según apretemos más o menos el mismo. En el mango hay un sensor de presión que activa un emisor que envía la señal a un receptor por radio, comunicándolo a un actuador que activa el disco de freno.

Para asegurarse la comunicación se han incluido varios emisores pero en las primeras pruebas han comprobado que es más importante una configuración correcta, ya que sin ella independientemente del número de emisores podría fallar hasta 3 de cada 5 veces.

Por ahora tiene un retraso de 250 milisegundos, que esperan mejorar además de incluirle un sistema de antibloqueo y control de tracción con unos pequeños ajustes.

Ya sólo falta que inventen el pedaleo inalámbrico y si es posible adaptarlo a los monociclos para que ahora que estoy haciendo el Camino de Santiago pueda pedalear por mi la gente cuando tenga que subir O Cebreiro.